Establecer un plan de alimentación para bajar de peso es fundamental si quieres perder de una vez por todas esos kilos de más. Más allá de dietas milagrosas que no aportan los nutrientes que tu cuerpo necesita, un plan de alimentación saludable unido a una rutina de ejercicio que se conviertan en hábito es la clave del éxito.
El bajar de peso se ha convertido en un objetivo de gran parte de la población mundial. El incremento de las tasas de sobrepeso y obesidad en la mayoría de los países del mundo, el consumo de comida chatarra y los malos hábitos de alimentación, son causantes de una epidemia que está cobrando cada año más vidas.
Y aunque cada vez se publican más dietas milagrosas en internet o en libros de supuestos gurús de la alimentación, los problemas de peso siguen en aumento. Entonces, cabe preguntarnos por qué si cada vez más gente se preocupa por una alimentación saludable, los porcentajes de fracaso por mantener un peso adecuado son tan altos.
Sin lugar a duda, hay dos factores fundamentales para lograr alcanzar un peso saludable y, lo más importante, mantenerlo en el tiempo: un plan adecuado de alimentación y un programa rutinario de ejercicio; uno sin el otro son sinónimo de fracaso.
Ya hemos hablado de la importancia del ejercicio en un plan de pérdida de peso; ahora te compartiremos 5 consejos para que tengas en cuenta a la hora de establecer tu nuevo plan de alimentación saludable de manera permanente y lograr el éxito.
1. Saca de tu vida la palabra “dieta” y reemplázala por “plan nutricional”
Aunque son conceptos relacionados y válidos cuando se busca perder peso, debe diferenciarse entre uno y otro, ya que hay aspectos que los diferencian de manera importante.
Una dieta implica un fin específico en un tiempo específico (perder 10 kilos en 3 meses), por lo que llevan intrínseco un nivel alto de exigencia, que muchas veces hace difícil cumplir las recomendaciones y por ende llegar a la meta.
Por el contrario, un plan nutricional se basa en las características individuales de cada persona, por lo que contempla múltiples factores como estado de salud, estado emocional, edad, género, actividades que realiza, gustos alimenticios y hasta factores económicos, por lo que se establece a largo plazo con el objetivo de que la exigencia y nivel de sacrificio para su cumplimiento sea menor.
Sin importar cuál de las anteriores opciones escojas, siempre debe ser supervisada por un profesional.
Cada persona es diferente, por lo que seguir dietas de revista, dietas de moda o las vendidas como dietas milagrosas, basadas en restricciones de ciertos tipos de alimentos sin la supervisión de un profesional, pueden afectar la salud de quienes las siguen.
Hoy existen diferentes corrientes motivadas por convicciones personales, como el veganismo, el flexitarianismo, el vegetarianismo, el kosher y el halal. Sin embargo, nuestro cuerpo necesita de todos los nutrientes en cantidades equilibradas, por lo que eliminar o restringir alguno de ellos no estaría en la vía de un adecuado plan nutricional.
Por lo general una dieta, basados en su definición, debe ser supervisada por un profesional en nutrición o nutriología, quien se asegurará de establecer tiempos y recomendaciones de alimentación. Por el contrario, un plan nutricional requiere de la intervención de profesionales de más disciplinas; es usual que los programas para bajar de peso sean conformados por especialistas en medicina interna, endocrinología, psiquiatría, nutrición y medicina del deporte.
El que quieras bajar de peso no significa que debas pasar hambre
Muchas personas que no se asesoran de un profesional, pretenden bajar de peso estableciendo periodos largos de ayuno, por ejemplo, comiendo solamente una o dos veces al día. Nada más errado y contrario a un objetivo de disminución de peso.
Es importante saber que nuestro organismo está diseñado para, ante todo, preservar las reservas energéticas necesarias para mantener la actividad diaria. Por esto, ante periodos largos de ayuno el cuerpo dispara un mecanismo de defensa para almacenar energía, que es convirtiendo la glucosa y el músculo en grasa, que le permite almacenar por más tiempo las calorías necesarias para funcionar. Por esta razón, si dejas de comer por periodos largos de tiempo, no sólo no bajarás el peso deseado, sino que destruirás tus músculos, convirtiéndolos en grasa. Un buen plan de alimentación busca que disminuyas el tamaño de las porciones de tus alimentos, pero que comas un mayor número de veces en el día (entre 5 y 6) para así mantener el metabolismo activado, quemar grasa y evitar el “picoteo”.
No te castigues si sucumbes a la tentación
Hemos dicho que el éxito de un programa para bajar de peso radica en la adopción de nuevos hábitos, que sean sostenibles en el tiempo. De acuerdo con algunos estudios, como el realizado por el University College de Londres, desarrollar un nuevo hábito toma en promedio 66 días, por lo que es casi seguro que no puedas cumplir con las recomendaciones del plan al 100% desde el comienzo y cometas algunos “pecaditos” con la comida.
Pero esto no debe ser un motivo de frustración que te aleje de tus metas; por el contrario, podemos verle el lado positivo. Un plan de nutrición diseñado especialmente para ti va a tener en cuenta tus gustos de alimentación y aquellas comidas “prohibidas” que tanto te gustan pero que no es recomendable que consumas. Sin embargo, si el equipo que te supervisa conoce tus características, estado emocional y de salud y tu grado de actividad física, puede establecer “recompensas” a tu esfuerzo y permitirte, de manera ocasional, cometer un pecado con ese postre o esa comida que tanto te gusta. Con lo anterior se pueden establecer unos premios a tu compromiso, lo que poco a poco hará más fácil adaptarte a los nuevos hábitos de alimentación y mantendrán elevada tu motivación.
No esperes milagros, ponte metas realistas y sé paciente y perseverante
El error más común que lleva a que nos desmotivemos en cualquier propósito es ponernos metas difíciles de alcanzar. Es por esto por lo que no debes tratar de copiar los resultados de alguien más, ya que nuestro organismo es único y por ende las respuestas serán diferentes.
Si tu meta es bajar 10 kilos en un mes es probable que te desanimes, ya que seguramente no lo lograrás. Un plan supervisado estimará, de acuerdo con tus características, la cantidad de peso que se espera que bajes en un determinado periodo de tiempo, por lo que tus metas serán más reales y alcanzables.
No olvides que vas a iniciar un camino largo, por lo que la paciencia y, más importante aún, la perseverancia serán tus armas más efectivas para lograr perder esos kilos de más que están afectando tu salud y mantener un nuevo peso saludable a lo largo del tiempo.
En CIGEO tenemos un equipo multidisciplinario de profesionales que se encargará de conocerte y diseñar un plan nutricional y de ejercicios adecuado para ti, y acompañará tu camino a la meta.
